jueves, 28 de mayo de 2015

Tipos de Gladiadores IV - Retiarius

Lucha entre un retiarius ,que ya ha perdido la red,
y un secutor. Villa romana de Nenning, Alemania
(siglo II-III d. C.)
Su nombre deriva de su arma más característica, la red (rete en latín). Esta red cuadrada tenía unos pesos en las esquinas para facilitar su lanzamiento. El retiarius necesitaba una distancia mínima para poder maniobrar la red y así lanzarla al enemigo y que quedase enredado en ella. Para este fin se ayudaba de un tridente (fuscina) de larga asta, el cual portaba en la mano derecha junto con una daga (pugio). Igualmente, la red tenía un cordel que iba atado a la muñeca izquierda del gladiador para así poder recuperarla en caso de errar el tiro. Si el retiarius lo veía necesario podía cortar la cuerda con el pugio y pasar a una segunda fase en el combate, en la que su única arma sería el tridente. Otra razón para cortar la cuerda podía ser el hecho de que el tiro fuera exitoso y el enemigo comenzase a atraer al retiarius hacia él con el peligro que conllevaba por el mejor armamento que poseía el contrario.


Como protecciones contaba con una manica que portaba en el brazo izquierdo (brazo de la red) que era el que quedaba más expuesto a la hora del lanzamiento. En el hombro del mismo brazo se colocaba el galerus, una placa de bronce, casi cuadrada. Se proyectaba unos 12-13 centímetros para proteger el cuello y la mayor parte de la cabeza de los golpes laterales. El borde superior del guardahombros estaba ligeramente curvado hacia afuera, lo que retardaba los golpes deslizantes y permitía a la cabeza moverse libremente. La testa no tenía más protección, ya que para poder maniobrar la red necesitaba tener un buen campo de visión.

Conociendo el gusto de los romanos por las confrontaciones por tipologías de gladiadores en la arena, este no era una excepción. Los retiarii se enfrentaban en la mayoría de las ocasiones a un secutor (seguir en latín, por la acción que realizaba de seguir al retiarius). Este gladiador se creó de forma específica para hacer frente a las armas y las defensas del pescador. Otra confrontación común era contra el murmillo (pez), la lucha entre el pescador con su red y el pez. El casco característico del murmillo con su cresta, hacía que fuese fácil que la red se le enredara en la cabeza destinándolo a un final fatal.

En la parte inferior de este mosaico del Museo Arqueológico Nacional de España, en Madrid,
el retiarius Kalendio captura al secutor Astyanax con su red.
Resulta curioso porque, en la imagen superior Kalendio aparece herido y tendido en el suelo,
 mientras que eleva su daga en señal de rendición.

Una vez se pasaba a la segunda fase del combate en la que el retiarius había perdido la red, era preferible usar el mango del tridente con las dos manos, lo que permitía al luchador usar ambos extremos y poder imprimir mayor potencia a sus ataques. Pese a esto, el gladiador podía empuñar la daga con la mano izquierda, donde le protegía la manica y el galerus, y mantener el tridente en su mano derecha. El casco del secutor era liso para que los ataques del tridente resbalasen por su superficie. Lo que podía hacer el retiario era enredar entre los dientes de su arma la espada el secutor o presionar los bordes del escudo.

El retiarius participaba también en una modalidad de combate especial que consistía en colocarse sobre un estrado cuadrado (entre 1 ó 2 metros sobre la arena) al que solo se podía acceder desde dos rampas opuestas. Desde esa posición ventajosa, el retiarius debía hacer frente a dos sectores que ascendían a la vez, uno por cada lado, tratando de derribarle. En la plataforma contaba con un número indeterminado de piedras para poder defenderse de los atacantes. Esta modalidad se conocía como pontarii, por la forma de puente (pons) que tenía la plataforma.

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